Emprender siempre será un reto, tanto económico como psicológico: ¿cuándo se debe tirar la toalla? Hay que aplaudir a las personas que saben cuándo dar de baja a un proyecto; del cual están enamorados, pero se dan cuenta de que el mercado no responde como pensaban. No es fácil, pero es tener olfato para anticipar una catástrofe en tu economía personal.
Ya. Eso casi nos pasó con Big Panda.
¿Saben cuán más-caro es producir ropa big size? No tenemos el cálculo concreto pero imaginen cuántos polos talla S entran en nuestro 5XL. Me atrevería a decir que estuvimos a una temporada de reducir drásticamente el presupuesto del proyecto e ir pensando en cómo deshacernos-rematar-reutilizar la colecciones no vendidas. Era el año 2019 y bajar la calidad de los nuevos productos, en sí, era una opción, pero nos iba a deteriorar la imagen a largo plazo. ¿Cómo apostar a futuro por un proyecto grande si lo quieres hacer crecer A COSTA de la calidad que recibe el cliente? Descartado. Decidimos hacer menos prendas pero mantener la calidad. Y encomendarnos a San Pandino de Los Imposibles.
Cada proyecto demora distinto en madurar y la luz estaba a la vuelta de la esquina. ¡Qué bueno que no desertamos! Ahora estaríamos vistiendo feo o ajustado.